El traer a vuestros hijos a la parroquia para su preparación a la primera comunión, indica por sí mismo que sois creyentes. Renovar vuestra fe como adultos es el objetivo de los mensajes que envío. Hemos partido de la comunicación entre vosotros, por ser el fundamento de todo.
Os hago una nueva pregunta para compartir el matrimonio:
. ¿Qué imagen tenéis de Dios?
. Y una propuesta: rezar cada noche los dos un padrenuestro con ellos, antes de que se acuesten.
Os dejo algunas consideraciones sobre ambas.
Si consideras a Dios como un anciano con barba que está detrás de una nube con un garrote, vigilando tu comportamiento, tienes una imagen distorsionada de Dios. Si te produce temor, también.
En la Biblia Dios se presenta de manera misteriosa. La presentación que más me gusta, y os propongo, está en el libro de Isaías, capítulo 41, 4: “Yo, el Señor, soy el primero, yo estoy con los últimos”.
Si creemos en un Dios así la mirada de la vida cambia. Él es el principio de todo y está de un modo especial con los últimos de la vida. Esa fe nos enseñará a ver la vida desde los últimos del mundo, porque son los predilectos suyos.
Él quiere hablar con nosotros, conversar, eso es la oración. La primera actitud antes Dios es “la escucha”. No hay comunicación sin actitud de escucha.
¿Dónde nos habla Dios? En su Hijo Jesucristo. Él es la Palabra hecha carne, como la nuestra.
Y lo primero que nos dice es que Dios es Padre de todos y nosotros hermanos. Lo explica en el Padrenuestro.
Rezar el Padrenuestro cada día con vuestros hijos antes de que duerman (abrazados a ellos), de manera consciente, despacio. pensando lo que decimos, es una gran catequesis dentro de la familia. Os invito a que lo hagáis.
Y rezar los padres por ellos cada día unos minutos, también.
Un fuerte abrazo a vosotros y vuestros hijos.
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